Con el comienzo del otoño llegan los primeros fríos y la temperatura invita a tomar bebidas calientes. Mónica Devoto, sommelier de té, explica: “el calor lleva a un té más fresco, como es el té verde o blanco, que se toman fríos, mientras que en otoño nos inclinamos más por el té negro o azul”.
Estos tés, el negro y el azul, se caracterizan por ser energizantes, gracias a que contienen teína, y además contribuyen a la digestión y a disminuir el nivel de colesterol en la sangre. Pueden consumirse de mañana, para empezar el día, luego de almorzar o a la tarde, para evitar la modorra.
Para el otoño la experta Mónica Devoto recomienda los siguientes blends:
El tradicional: Earl Grey
El Earl Grey es uno de los blends más populares: es un tipo de té negro, generalmente de origen indio, aromatizado con aceites esenciales de bergamota. Se trata de una infusión fuerte, de sabor intenso, ligeramente amargo y con notas cítricas.
El nuevo clásico: Six Apples
El combinar té negro con frutos siempre funciona. Además del tradicional Earl Gray, Mónica Devoto sugiere probar el blend Six Apples, con trozos de manzana y brotes de saúco, “con notas dulces y ácidas”. Es ideal para agregarle un toque de leche.
El exótico: Oolong
También conocido como té azul o té semifermentado, es una variedad que se encuentra entre el té negro y el té verde, y es una de las variedades más valoradas. Tiene propiedades antioxidantes que son excelentes para retrasar el envejecimiento de las células. El blend Secretos de Aída –con mango, papaya, ananá y flor de hibisco– es el elegido de Mónica.
El relajante: Tisana
Para quienes no se les aconseja consumir teína –por ejemplo embarazadas, personas con arritmia o hipertensas– pueden optar por una tisana para sacarse las ganas de una infusión tibia. Un ejemplo es el blend Ikebana, que tiene hojas de ortiga, bálsamo de limón, lemongrass, hojas de moringa, brotes de caléndula y rosas y bayas goji.
Ahora solo queda elegir tu taza favorita y una tetera en Divino y comenzar a disfrutar.
